Desde 1992, el Senado francés, al igual que la Asamblea Nacional , puede adoptar resoluciones sobre los proyectos, propuestas y documentos comunitarios que le presente el Gobierno antes de su adopción. Este procedimiento permite al Senado comunicar al Gobierno su punto de vista sobre un proyecto en plena negociación, antes de que se haya tomado una decisión.
El Senado ha confiado a la comision para la Unión Europea el examen sistemático del conjunto de los textos europeos que se le transmiten.
La comision recibe anualmente más de 300 textos e intenta realizar una "criba" ante este gran número de documentos, no todos de igual importancia. Cada texto es analizado por los miembros de la comision, pero solo para aquellos que tienen cierta relevancia, política o económica, se procede a la redacción de conclusiones para el Gobierno o a la presentación de una propuesta de resolución que podrán debatir los senadores en el seno de la comisión permanente pertinente o en sesión plenaria, según proceda.
El Gobierno toma nota de las posiciones parlamentarias y en especial de las resoluciones adoptadas por las asambleas durante las negociaciones que tienen lugar en el Consejo de la Unión Europea. Aunque las resoluciones no tienen efecto vinculante, puesto que constituyen una expresión política y no un texto restrictivo desde el punto de vista jurídico, la experiencia muestra que la postura defendida por el Gobierno en el seno del Consejo tiene en cuenta las preocupaciones expresadas en las resoluciones parlamentarias.